Introducción
Nuestra querida Madre Gaia ha atravesado las pruebas más difíciles que cualquier ser puede imaginar. La implementación de la Matrix 3D en su superficie y el largo historial de conflictos que incluyen hasta guerras nucleares , han dejado cicatrices profundas en ella.
A lo largo del tiempo, la humanidad ha contribuido a su debilitamiento mediante el derramamiento de sangre, la explotación indiscriminada de sus recursos y la manipulación tecnológica de su atmósfera, todo mientras las mentes humanas han permanecido esclavizadas a través de la limitación adrede de su nivel de conciencia.
Es crucial recordar que Gaia es un planeta con conciencia propia, adquirida a través de los dragones Kumara, y fue elegida para albergar una extraordinaria diversidad de minerales, especies vegetales, animales y los seres humanos con la mayor variedad de hélices de ADN de diferentes razas galácticas, incluyendo la autóctona del planeta. A través de estas hélices de ADN compartidas, se estableció una relación directa entre Gaia y nuestra raza, relación que incide tanto la atmósfera terrestre como los movimientos de rotación y traslación del planeta.
El Proceso de Degradación de Gaia
Gaia fue sometida a un proceso de degradación en su superficie que logró reducir su frecuencia vibratoria en una octava, forzándola a sostener vida en el elemento carbono en lugar de su forma natural en silicio. Este cambio artificial modificó la superficie del planeta, alterando su estructura, su atmósfera, sus temperaturas y dando origen a las cuatro estaciones por el desplazamiento en 23.5 grados de su eje de rotación, lo que invirtió su movimiento.
Este proceso fue inducido por los Anunnakis con el objetivo de crear una cárcel planetaria, utilizando a los humanos como obreros esclavizados de manera inconsciente para extraer el oro requerido. Así, crearon un sistema artificial, la Matrix 3D, para encarcelar la conciencia humana, ya debilitada por la colocación deliberada de un sello entre las hélices 2 y 3 de nuestro ADN.
La fácil explosión demográfica, resultado de la manipulación original de la raza humana para generar mano de obra rápidamente, se convirtió en un desafío para los controladores, quienes implementaron diversas estrategias para mantener a la humanidad bajo su yugo. Estas estrategias incluyeron:
- Diezmado de la población para evitar que se despertara colectivamente, y para prevenir el desencadenamiento de un "evento de despertar" global, impulsado a través de la teoría de los campos morfogenéticos .
- Segmentación de la población, facilitando su manipulación a través de mentiras, intoxicación masiva y el fomento de enfermedades, que crearon el proceso de envejecimiento. El reciente pseudo sistema de salud valida el proceso de la vejez como un fenómeno natural, mientras ayuda a perpetuar la esclavitud y la reencarnación de las almas sin memoria, para reiniciar el ciclo de manipulación.
Además, el control de la información se utilizó para difundir mentiras como verdades, al mismo tiempo que se restringía el desarrollo científico, especialmente el tecnológico, para evitar que la humanidad alcanzara un nivel de vida holgado, que les permitiera conscientizarse de su estado de esclavitud.
La Incursión de la Federación Galáctica
Frente a estas graves violaciones al libre albedrío, la Federación Galáctica intervino para salvar a la humanidad del genocidio. Esto recuerda el destino de la raza de los Elfos, que fue asesinada por los regresivos a través del Diluvio Universal .
La Federación envió al Arcángel Rafael y a 144,000 almas prístinas con una misión clara: librar una guerra de tipo espiritual para elevar el nivel de conciencia promedio de la humanidad y disolver la Matrix 3D, facilitando así la liberación del ser humano.
El Proceso de Recomposición de Gaia
A medida que la batalla espiritual se intensifica y el nivel de conciencia colectiva de la humanidad aumenta, la superficie de Gaia comienza a restablecer su antiguo equilibrio y regresar a su forma natural original. Este proceso es similar en sentido opuesto a los que anteriormente fueron desencadenados artificialmente por los regresivos, alterando el equilibrio estructural, y el atmosférico hasta mediante tecnologías tipo HAARP. De forma paralela, la ruptura del sello entre las hélices 2 y 3 del ADN humano está provocando cambios en nuestros cuerpos densos, lo que genera síntomas que asemejan enfermedades.
Conclusión
Estos procesos de transformación, tanto en Gaia como en nuestros cuerpos, son tan profundos y complejos que a menudo se perciben erróneamente, generando confusión en lugar de claridad. Sin embargo, a pesar de los malentendidos, estos eventos son parte esencial del proceso hacia nuestra liberación.
Igualmente, las masas de personas hipnotizadas en diferentes partes del mundo siguen sin interesarse por LA VERDAD revelada por el Arcángel Rafael y transmitida por los 144,000 guerreros de luz que lo acompañan. Su misión es guiar a la humanidad hacia su proceso de liberación, respetando siempre el libre albedrío de cada ser.
Lo que realmente está ocurriendo, tanto en Gaia como en nosotros, es un proceso de recomposición enmarcado en el Evento de Ascensión. Las voces que continúan promoviendo desinformación y las plataformas controladas por los regresivos están ayudando a retrasar este necesario proceso, que es crucial para permitir que más seres humanos asciendan.
Hemos recibido mensajes canalizados del Padre Creador, la Madre Divina, el Arcángel Miguel y otros seres de luz que nos recuerdan la importancia del despertar colectivo. Ellos no pueden rescatarnos en contra de nuestra voluntad, ya que la ascensión depende de la frecuencia vibratoria del nivel de conciencia que logremos alcanzar como humanidad.
Por ello, seguimos revelando LA VERDAD y pidiendo a todos los guerreros de la luz que la difundan. Al hacerlo, no solo aceleramos el proceso de recomposición de Gaia y el nuestro, sino que también facilitamos el ascenso de nuestros hermanos y la superficie del planeta.
Te invitamos a colaborar en la difusión de LA VERDAD y contribuir así a la aceleración de la ascensión planetaria. Tu participación es esencial para que más almas puedan alcanzar la libertad y que Gaia recupere su original prístina belleza.
