Introducción
Hoy quiero abordar un tema profundamente delicado: la responsabilidad kármica. Se trata de responder por nuestras acciones, incluso cuando, de manera inconsciente, hemos alterado el plan divino.
Los seres humanos que vivimos en esta realidad 3D, artificial y engañosa, la cual se nos presenta como la única civilización en el universo, hemos convertido el engaño, la mentira y la traición en herramientas cotidianas. Llegamos al punto de que el uso de estas prácticas se considera un signo de astucia social.
Recuerdo a un amigo de la adolescencia que, con cierto orgullo, decía que dormía mejor por la noche cuando engañaba a un amigo. También tengo presente un dicho de un vendedor de IBM: "Jesús dejó un mandamiento: 'Ahí os dejo para que el más vivo viva del más pendejo'". Así de profunda es la manipulación que los seres humanos, influenciados por fuerzas regresivas, pueden experimentar.
La Responsabilidad Kármica
Aunque los regresivos han logrado distorsionar el principio universal de causa y efecto, aplicándolo selectivamente contra la humanidad, existe un principio infalible de Causa y Efecto en los mundos naturales (reales), que actúa de manera incuestionable para equilibrar el universo.
Es importante reflexionar sobre esto, porque la humanidad se ha acostumbrado a vivir bajo esta distorsión, viéndola como algo natural. Más aún hoy, en la era de las redes sociales y los nuevos "famosos", los llamados "influencers", quienes adquieren poder sobre multitudes hipnotizadas a través de vistas, "likes" y comentarios. De hecho, muchos recurren a empresas especializadas para aumentar artificialmente su influencia, comprando vistas y "likes" para atraer a personas bien intencionadas y engañarlas.
La humanidad ha caído tan profundamente en este engaño que ha sustituido a Dios por el dinero y ha convertido la estafa en una "virtud" para alcanzar sus fines. Todo esto responde a la creación del ego, que reemplaza nuestro ser verdadero (un tema que ya hemos abordado en otras ocasiones).
Los "Periodistas de la Luz"
El ego, en su búsqueda de fama, poder y dinero, ha llevado a muchos seres humanos a crear grupos y canales en redes sociales para informar a las masas hipnotizadas. No les importa desinformar, porque su objetivo es claro: alimentar su ego, sentirse poderosos, famosos y ricos. Este deseo los lleva a creerse "especiales", a verse como elegidos. Siempre recuerdo que el peor de los orgullos es la humildad de pretender ser espiritual.
Sin embargo, el proceso de liberación que se está llevando a cabo en el planeta depende de la información. Y no se trata de cualquier información, sino de LA VERDAD. Porque si no es LA VERDAD, se está desinformando. Como dice el refrán: "La verdad a medias es una mentira verdadera". La desinformación no puede ayudar a elevar la frecuencia de conciencia de los hipnotizados ni contribuir a su liberación de la cárcel vibracional de 7.83 Hz en la escala de Schumann.
La Misión Divina
El Padre Creador me envió al planeta para:
- Revelar LA VERDAD a la humanidad, porque yo soy el Arcángel Rafael, regente de LA VERDAD, la Salud y el Karma de la humanidad, así como de Gaia, nuestra amada Tierra. Junto con la Arcangelina Regina, la Madre Divina (la Virgen María), somos los regentes del rayo verde. Ella descendió para apoyarme emocionalmente en esta misión, acompañada de la Arcangelina Esperanza. Lamentablemente, Cristal, la Elohim del Karma, descendió también como mi hija física para darme apoyo, pero sucumbió a las bajas frecuencias de la Matrix 3D.
- Recibir LA VERDAD cambia la percepción del mundo. Sustituye la mentira y eleva el nivel de conciencia, lo que atraerá a aquellos que están dispersos por el planeta, los cuales forman parte del batallón estelar. Esto es necesario por razones de seguridad.
- El batallón tiene la misión de elevar su nivel de conciencia con LA VERDAD, comprendiendo que el objetivo es difundirla. Cada ser humano tiene el libre albedrío de decidir si se libera de su prisión o no.
No obstante, muchos se autodenominados "periodistas de la luz", que aseguran trabajar por la liberación humana, cometen un grave error al difundir medias verdades. Esto no solo desinforma, sino que mantiene a los hipnotizados en su sueño. Estos periodistas deben comprender que deberán rendir cuentas ante la Divinidad por sus acciones, las cuales su ego percibe como bienintencionadas, pero que los llevarán a una involución de miles de años, pues no estarán capacitados para ascender, a pesar de que creen firmemente lo contrario.
Mi Pregunta
Mi pregunta es: ¿No sería más fácil unirnos todos y difundir LA VERDAD? ¿Realmente vale la pena perder la oportunidad más anhelada por una civilización: LA ASCENSIÓN?
