Es una institución fundada por un gran arconte encarnado, Constantino “El Grande”, emperador de Roma. La misma fue creada para aprovechar y tergiversar el creciente conocimiento dejado por Jesús, convirtiéndolo en un dogma de fe que serviría para la programación, desinformación y manipulación de la humanidad para prolongar su esclavitud.
Aprovecharon para insertarr mensajes subliminales como que Jesús nació pobre y vivió en la pobreza, para que aceptáramos la pobreza como un sacrificio loable que nos exalta. Además del sacrificio por la humanidad a través de la crucifixión, para salvarnos de un pecado original e inducirnos un sentimiento de culpa para manipularnos. Así nuestra disposición al dolor a través de los sacrificios, pobreza económica, serían algo aceptados naturalmente.
La verdad es que la iglesia católica es la institución más demoníaca que se ha creado, ya que adoraba a demonios como los Arcontes, los Anunnakis y las hordas satánicas, principalmente a Yaldabaoth.
La metodología de imponer las creencias iniciales fue a punta de espada -quien no las aceptaba era asesinado, imponiendo su verdad a través del terror. Inventaron los pecados para cargarnos de culpa, porque los Arcontes nos inducían pensamientos para cometerlos y crearon la confesión para enterarse de nuestros pecados cometidos y monitorear para extorsionarnos en caso necesario.
La iglesia llegó a poseer el título de propiedad del planeta e inventaron los sacramentos para conseguir el título de propiedad de cada uno de nosotros a través del bautismo.
Cada vez que íbamos a la iglesia a sus misas y nos persignábamos, ratificábamos el pacto de entrega a sus demonios. Son ellos quienes empiezan a aplicar la programación mental a través del famoso credo.



Además de que seguían los patrones de siempre, como abusar sexualmente de los niños y torturarlos dentro de sus rituales diarios, luego ingerían su sangre cargada de adrenalina, adrenocromo (se llegó a vender por internet con fines de rejuvenecerse), luego lo desmembraban y ofertaban las partes a sus demonios.
Llega a ser la institución más represiva, utilizando el asesinato sobre todo aquel que quisiera salir de la ignorancia impuesta por ellos. Dominada mayormente por homosexuales, pedófilos, y degenerados, crea la orden de Jesús como su bastión de inteligencia, genocidio y dominio detrás de instituciones como el Opus Deis y los masones.
Los jesuitas se autoflagelan diariamente para entender que la vida es soportar dolor, llevándolos a una falta de auto respeto, auto estima y empatía, para así formar soldados capaces de los crímenes y asesinatos más horrendos contra la humanidad, como lo fue el santo oficio, “La Inquisición”.
Por esto se declaran un estado autónomo, para garantizar su impunidad total ante cualquier gobierno. Llegó a tener el control casi total de occidente y ejecutó los genocidios a los esenios, los cátaros, los templarios, los indígenas, entre otros.
Por esto consiguen el concordato, de manera tal que todos los estados le donaban dinero para su existencia, crecimiento y perpetuidad. La mayoría de sus símbolos son adorando a los Anunnakis y/o a sus demonios. Sin embargo han vendido la imagen opuesta a la humanidad, se autodenominan los representantes de Dios, los herederos y transmisores de las enseñanzas de Jesús. O sea, son los intermediarios autorizados.
Realmente no se casaban porque necesitaban reclutar homosexuales y pedófilos a sus servicios. La mujer era vista como un ser de menor importancia, hasta maligno, porque la mujer era una de las vías de sacarlos de sus atrocidades, por esto convierten a María Magdalena en prostituta y la Virgen María concibe a su hijo por obra y gracia del espíritu santo, como una forma de degradar el sexo y a las mujeres.
La iglesia católica era la dueña con su título de propiedad de Londres y de Washington DC, por eso el Papa Francisco en 2015 es quien va a Estados Unidos y destituye al vocero del senado, para justificar el incumplimiento del contrato de entregar el planeta el 30 de septiembre de 2014, al finalizar la reunión de la ONU en New York, como pactaron con la Federación Galáctica de la Luz.